Es posible que te sorprendas de las palabras que he elegido. Pero como verás, la Inteligencia Emocional se trata de usar estas palabras de la manera correcta.

Bien hecho. 
La gente anhela elogios, y todos merecen el elogio por algo.

La clave es aprender a darlo de forma sincera y específicamente. La alabanza no sincera hará más daño que bien; mientras que el elogio específico es edificante. Domina esto, y encontrarás que las personas son más amables y más a cambio.

Por favor y gracias. 
Son más que buenos modales. Es motivador

No.
Para todos los que quieran complacer a la gente, esta puede ser la palabra más difícil del mundo para hacerlo bien. Pero en algún punto, debes enfocarte y no dejar que otros gobiernen tu vida. Eso significa aprender a decir no.

Porque cada vez que dices que sí a algo que realmente no deseas, en realidad estás diciendo que no a las cosas que haces.

Sí. 
Cuando dices que sí, lo dices en serio. Eso significa comprometerte a ti mismo. Ir incluso si deseas que no hubiera dicho que sí en primer lugar.

Porque si mantienes tu palabra, en cosas grandes y pequeñas, no solo fortalecerás tu reputación, sino que lograrás mucho más al final.

¿Qué piensas? 
Si eres el líder de un equipo, hacer que tu gente sea parte del proceso de decisión le ayudarás a obtener tu apoyo.

Si sigues a un líder, asegúrate de comprender la perspectiva de esa persona para que te ayude a ver el panorama general y a agregar un mayor valor.

Hola. 
No subestime el poder de un saludo: a tu camarero, a tus colegas, a tu familia cuando llegue a casa por el día.

Tomar un momento para saludar a los demás establece un terreno común y muestra respeto.

¿Cómo estás? 
Para usar inteligencia emocional, tienes que hacer más que hacer esta pregunta y seguir adelante; debes prestar atención a la respuesta. A veces, el tono de la voz o la expresión facial dicen algo diferente a las palabras que salen en respuesta.

Ponte a disposición para hablar, sin forzar a la otra parte. Hacerlo muestra interés personal y construye confianza.

Dime más. 
Cuando alguien más confíe lo suficiente en ti como para compartir sus pensamientos, honra esa confianza escuchando verdaderamente. Invítalos a compartir más, y fomentarás relaciones más profundas y cercanas.

Eso es suficiente. 
Por el contrario, si alguien cruza la línea o exhibe un comportamiento tóxico, no tengas miedo de establecer límites. Hablar con confianza lo ayudarás a hacer que tus valores y principios sean claros para todos.

¿Puedo compartir algo contigo? 
Muchas personas no responden bien a los comentarios críticos.

Al hacer esta pregunta, y al ser consistente con las otras palabras o frases en esta lista, dignifica a los demás, hágales saber que estás de su lado, y gane su respeto en el proceso.

Por último, cambia dos palabras que rompen la comunicación

Cambiar “Pero” por “Y”

El “pero” es una palabra que anula todo lo anterior, mejor si usas la “y”. Si haces un elogio y usas “pero” seguido de una reprimenda… la persona se queda con lo negativo eliminando el elogio. Si usas “y”, el elogio se queda con una reprimenda asimilable preparando la mejora.

Cambiar “Sólo” por “Aún”

El “solo” es presión, es límite. El “aún” es suficiente y tranquiliza. Lo suelo usar mucho cuando me despierto por la noche, no es lo mismo decir “sólo me quedan 2 horas de sueño ” que “aún me quedan 2 horas de sueño”. Me funciona y lo uso en muchas ocasiones durante el día.

¿Tienes algunas palabras o frases que ayudan a tu Inteligencia Emocional?